El camino
lo vamos a realizar en las estribaciones
septentrionales de la Sierra de la Alpujata, y daremos comienzo en el mismo
centro del pueblo de Monda por lo que podemos aprovechar para hacer un pequeño
recorrido turístico por sus calles.
Durante
parte del camino iremos bajo el manto de un bosque de repoblación de pinos
carrascos y debido a la época en la que estamos, disfrutaremos de algunas
variedades de orquídeas silvestres, pero
si quieres más información entra en el blog:
Para
iniciar la ruta nos dirigimos hacia el Municipio de Monda, partiendo de Málaga,
tomaremos la autovía del Guadalhorce A-357, hasta la salida 48 donde tomaremos
dirección Coín-Marbella por la A-355y tras 16,5 km llegaremos a la entrada del
pueblo de Monda. Entramos en él y nos dirigimos hacia el centro, hacia la calle
Feria donde dejaremos aparcados los coches.
Comenzamos
a caminar remontando la calle Feria y nos dirigimos hacia la Fuente-Lavadero de
la Jaula.
Fuente-Lavadero de la Jaula:
Tipología: Lavadero público.
Actividades: Actividades
domesticas.
Periodo histórico: Edad
Moderna.
Descripción: Lavadero con fuente adosada en el exterior,
situado junto al río y el puente que cruza éste. Es un edificio de mampostería
con verdugadas de ladrillo, con cubiertas a un sólo agua. La fachada que da al
río está compuesta de arcos, y las demás son ciegas. La estructura de la
cubierta es de madera. Tiene planta rectangular, estando parcialmente abierta
en su lado sur, cerrada en sus lados menores, aunque presenta ojos de buey en
estos lados, y abierta en su totalidad en su flanco norte que es donde tiene la
entrada. El lavadero consta de una gran pila rectangular ubicada en su parte
central y de dos filas de piedras de lavar, una a cada lado mayor del pilar. La
fachada que da a la calle principal posee una fuente de cuatro caños, en mármol
negro; sobre ella una cruz en mármol blanco rematada en una hornacina. La base
de la cruz tiene una inscripción que dice:"MONDA. AÑO DE 1.788". El
lavadero ha quedado situado entre dos calles y el puente, espacio idóneo para
crear una plaza urbana de proporciones recoletas. El río está cubierto con
bóveda de hormigón.
Datos Históricos: La fuente y lavadero de La Jaula toma su
nombre del topónimo árabe al-Haura, que significa “las afueras”, pues se
encuentra en una hondonada que produce el arroyo de La Lucía, que atraviesa el
pueblo. Tras la conquista castellana de la villa de Monda, sus vecinos
mantuvieron su nombre pero castellanizado, denominándola fuente de La Jaura,
mutando a lo largo de la última centuria a su actual nombre: “La Jaula”. Ya en el siglo XVI aparece mencionada
en documentación de la época y el agua de este manantial se ha usado desde hace
siglos para consumo humano y para abrevar el ganado, yendo el caudal remanente
al lavadero anexo, primero, y a sendas acequias que riegan los huertos y pagos
de huertas de los Huertos y Pitalata, después. Posiblemente hacia finales del siglo XIX o principios del XX a la
fuente se le adosó un lavadero público con cubierta a un agua de tejas árabes,
sustentada por arcadas de medio punto erigidas con ladrillos.
Tras
dar una vuelta por el lavadero y hacer algunas fotos seguimos por calle Valdescoba,
al final d la misma tomamos por la izquierda, hacia calle Estación y seguimos
por ella hasta la Plaza de Andalucía, giramos a la derecha hacia calle Dr.
Jimenez Encina, pasamos junto a la Casa-Museo Mariagloria.
Casa-museo Mariagloria
Se
trata de una vivienda incrustada en pleno casco histórico, a la entrada de la
calle Amargura, que representa el arquetipo de vivienda popular andaluza de
fachadas encaladas y enjaezadas por flores y plantas, con la forja en sus
ventanas y balcones y rematada por un tejado de teja árabe. Esta casa fue
durante mucho tiempo una tahona, donde se amasaba, horneaba y despachaba pan,
como recuerda Marigloria. En su interior se conservan, artesas, lebrillos y
demás útiles para la elaboración del pan. Además de estos enseres su dueña ha
recabado toda una colección de aperos y mobiliario de época representativos de
la vida cotidiana de antaño, configurando un museo etnográfico con una
riquísima colección de piezas. La visita a este emblemático lugar supone un
salto en el tiempo para el visitante que permite observar desde una posición
privilegiada las formas de vida del medio rural andaluz, considerándose uno de
los lugares más interesantes del municipio y de toda la Sierra de las Nieves.
Su visita es imprescindible para conocer la idiosincrasia de este pueblo. Su acceso es libre y gratuito, pero no
deberíamos abandonar esta casa sin aportar un donativo que contribuya a su conservación,
puesto que su dueña lo mantiene sin ánimo de lucro.
Al
final de la calle tomamos por la derecha hacia calle Marbella y a pocos metros
nos encontramos con otra de las fuentes de la localidad en este caso la Fuente
de la Mea-mea.
Fuente de la Mea-mea
Es
una modesta fuente, en cuanto a caudal y monumentalidad se refiere, que antaño
se situó en el extremo inferior de la calle Marbella; hoy día por su forzado
traslado y por el crecimiento del entramado urbano se ubica hacia la mitad de
esa vía. Su traslado definitivo desde su primigenia ubicación se hizo en 1890
tal, y como atestigua la inscripción que la corona: “Fue reformada esta fuente
nueva el año 1890. Administrada por Dn. Pedro Mancha Villalobo”.
Seguimos subiendo por calle
Marbella hasta llegar a la carretera A-7101 donde encontramos un cartel
informativo, aunque está estropeado y no podemos leer su contenido; cruzamos la
carretera por un tubo que nos sirve de túnel y salimos al otro lado de la
carretera, tomamos por la izquierda, por el carril “Paraje del Camino Alto”
primero dirección este y tras un giro en dirección sur, dejamos atrás varias
entradas a fincas privadas, tras pasar la intersección 4, llegamos al cartel
informativo de la subida que la hacemos por la Cañada La Tocha, al final del carril, aparece la vereda entre dos entradas, a escasos metros se
introduce en el pinar y poco a poco vamos caminando y subiendo hasta llegar al
cortafuegos, al principio con menos desnivel y más al final, cruzamos el collado,
la vereda por la que tenemos que seguir no se encuentra justamente al frente
sino un poco a la derecha, tenemos un poste direccional que nos identifica el
punto (intersección 7), nos adentramos nuevamente por el bosque, la senda no
está muy definida por lo que tendremos mucho cuidado, en un claro del bosque
nos encontramos con unas fantásticas vistas de la Sierra de Alpujata, con su
pico Castillejos fácilmente identificable por sus antenas. Continuamos hasta la
intersección 8 y tomamos por la izquierda, mas adelante llegamos a una gran
piedra a la izquierda, en este punto intersección 9, tomaremos a la derecha (sin
senda) para subir a la cantera, donde tenemos una maravillosas vistas de la
Sierra Canucha, hacemos algunas fotos y retornamos a la piedra.
Seguimos
de frente por la vereda, llegamos a otro poste direccional y seguimos sus
indicaciones, ya vamos bajando y como en la subida, al principio el desnivel es
menor y mayor al final, en esta bajada encontramos unas estructuras de piedra y
otras de madera que al principio no sabemos que son ,pero que creemos estamos en
un antiguo circuito de BTT, continuamos
bajando y nos encontramos con unas colmenas de abejas y antes del final un
aljibe, ya al final de esta en la intersección 11, tomamos por la izquierda,
pasamos por la puerta del cementerio y seguimos por la carretera buscando el
campo de fútbol, pasamos por la entrada del recinto deportivo y tras este
subimos hacia la Adecuación Recreativa La Alpujata, aunque antes decidimos
pasar por la Ermita de San Roque y después de hacernos fotos buscamos una mesa
a sol y nos comemos el bocadillo.
Una
vez acabado con la comida volvemos hacia la entrada de la ermita, tomamos por el carril de
enfrente de la entrada a la ermita y tras
unos metros nos vuelve al pinar, llegamos frente a una verja que creemos nos
impide el paso, pero a la izquierda subimos un poquito y descubrimos que hay una
paso de servidumbre entre dos fincas privadas.
A
partir de aquí vamos caminando otra vez sobre asfalto y entre fincas privadas,
siguiendo siempre en bajada y dejando atrás varias calles, al final llegamos a
la carretera A-355, pero antes de pasar por debajo de ella vemos a nuestra
derecha el cartel informativo de la ruta que acabamos de realizar y que era el
que habíamos visto en la prensa.
Ahora
sí cruzamos por debajo de la carretera y seguimos dirección de nuevo hacia el
pueblo, entramos por calle Márquez Álvarez, hasta la Plaza del Carbonero y desde
aquí por calle Jaula volvemos a la fuente-lavadero y a calle Feria donde
tenemos el coche.
Al
final algo menos de 7 kilómetros.
