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| Cascada La Cimbarrilla |
Ruta por el Sendero de las
cascadas de La Cimbarra y del Cibarrillo. (Aldeaquemada - Jaén).
Hoy vamos a visitar uno de los
parajes que se encuentran en Despeñaperros y que forma un abrupto conjunto de
lo más pintoresco. Es el Paraje Natural Cascada de la Cimbarra, donde se
encuentra la cascada del mismo nombre, un gran salto de agua de aproximadamente
unos 25 metros de altura situada en un entorno modelado por la actividad
tectónica y la acción del río Guarrizas. La Cascada de la Cimbarra tiene lugar
gracias a una falla transversal al cauce del río Guarrizas. Se trata pues de
una pared vertical compuesta por cuarcita de gran dureza, formada en el mar
hace 500 millones años
Supone una auténtica sorpresa para los
visitantes que se atreven a transitar por estos parajes serranos, antiguo
refugio de bandoleros.
Otro
aspecto de gran interés que guarda la cascada son las muestras de pinturas
rupestres tanto en la misma cascada como en las cuevas del entorno.
Para
iniciar la ruta nos dirigimos hacia el Adeaquemada, en Jaén por la autovía del
Sur A-4 hasta la salida 252 donde tomaremos por la J-6110 y desde aquí 20
kilómetros hasta nuestro destino y nada más llegar al pueblo seguiremos las
indicaciones hacia la Cascada y a unos 2,5 kilómetros del pueblo se encuentra
el aparcamiento del paraje y el inicio del sendero.
En este
punto tenemos los carteles informativos y tenemos tres caminos diferentes; el
de la izquierda es un carril que nos llevará al Área Recreativa de Martín Pérez
y desde aquí al sendero del mismo nombre, este camino será el que utilizaremos
para la vuelta. El camino del centro es por si queremos regresar desde el
Mirador del Desfiladero y por último tenemos el de la derecha que será el que
tomaremos para comenzar a caminar.
La senda
que está bien marcada nos hará ir descendiendo poco a poco, la vegetación que
nos acompaña y nos limitan el camino está compuesta principalmente por jaras,
romeros y tomillos.
Llegamos
a una zona abierta que nos permite ver la espectacularidad del enclave y
conforme nos acercamos a nuestro destino, el murmullo se va amplificando hasta
llegar a ser un verdadero estruendo, delata a uno de sus protagonistas
principales: el Río Guarrizas.
Seguimos
caminando y bajando hasta llegar al “Barranquillo”, en este punto dejamos la
senda principal y bajamos por una pequeña vereda de fuerte pendiente, pero sin
mayores dificultades. A mitad de camino nos encontramos las ruinas de un
antiguo molino, y seguimos bajando hasta el espectacular mirador que hay frente
a la cascada, desde aquí tenemos las mejores vistas.
Tras realizar unas fotos que
inmortalicen el momento, volvemos por la vereda hasta el cruce anterior y una
vez aquí seguiremos por la vereda hasta llegar a La Plaza de Armas que es una
plataforma rocosa colgada sobre el curso del río Guarrizas. Primeramente,
encontraremos a la derecha otro bonito mirador, que nos brinda una espectacular
vista panorámica de la cascada, la poza y toda la garganta del río.
Tras
detenernos un tiempo en el mirador y observar la grandeza de tan exclusiva joya
de la naturaleza, continuaremos nuestra senda hasta encontrar unas indicaciones
que nos informan de la existencia de otro mirador, conocido como Mirador del
Desfiladero. Así seguiremos las indicaciones que nos llevaran a disfrutar de
unas vistas que, aunque diferentes nada tienen que envidiar a las anteriores.
Si miramos hacia abajo podremos observar cómo discurre el agua del río
Guarrizas y a escasos metros, aguas abajo el Charco del Negrillo, un hermoso
remanso rodeado de frondosa vegetación. Al frente podemos observar la
existencia de un enorme pliegue de los estratos rocosos.
Además,
este mirador es un buen lugar para contemplar la variedad de formaciones
vegetales que hay en este paraje natural. A primera vista resalta el típico
encinar mediterráneo acompañado por matorral característico compuesto de jara,
lentisco, romero, enebro y labiérnago. El encinar cederá su lugar a almeces,
madroños, cornicabras y quejigos en las umbrías, y a los alisos y fresnos en el
cauce del río. En la lejanía a nuestra izquierda observaremos unas extensas
poblaciones de pinar que se encargarán de marcar el contraste del paisaje. Al
otro lado, si seguimos el camino hasta el desfiladero que se precipita sobre el
arroyo de Martín Pérez, encontraremos los restos de la muralla de un antiguo
poblado ibérico.
Continuamos
nuestro periplo y ahora bajamos y nos acercamos a la derecha para buscar la
senda que nos hará de unión de este recorrido con el Sendero de Martín Pérez.
Una vez
hemos descendido hasta el mismo cauce del Arroyo de Martín Pérez nos
encontramos el sendero del mismo nombre, si tomamos a la derecha podemos ir a
ver el Charco del Negrillo y volver para continuar, aunque hoy no lo vamos a
realizar, así que tomamos a la izquierda y a pocos metros llegamos a otro de
esos maravillosos rincones, se trata del Cimbarrillo, una cascada más pequeña
que la Cimbarra pero no por ello menos bella.
Justo
antes de entrar a donde se encuentra, hemos dejado a la derecha una escalerita
de piedra, por aquí seguiremos tras la visita de la cascada.
Retornamos
hasta la pequeña escalera y subimos por ella, nos situamos justo por encima de
la cascada y conforme avanzamos vemos como el encajonamiento del arroyo se va
abriendo y da paso a un fantástico bosque de galería donde los alisos, los
fresnos y algún ejemplar de almez se encargarán de arropar al sendero.
Seguimos
remontando el arroyo por su margen derecho, es decir nuestra izquierda, hasta
llegar al Área Recreativa Arroyo Martín Pérez, ideal para compartir una comida
familiar o con los amigos que nos acompañen.
Desde
aquí para retornar al coche solo tenemos que subir por el carril de nuestra
izquierda y en menos de un kilómetro estaremos en los aparcamientos donde
dejamos el coche.
En total
algo menos de 4 kilómetros.
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